El Sufragio

Miércoles Noviembre 06 th 2012
El sufragio se conceptualiza como aquella institución de carácter democrático de derecho público, que concede la facultad de elegir a sus gobernantes, o al menos a los legisladores y administradores locales, a todos los ciudadanos del país. De igual manera se define como el sistema de elección para los cargos públicos mediante la manifestación de la voluntad popular.
En tiempos atrás se conceptualizaba al sistema electoral general, como aquél que establece el sufragio universal o concesión del derecho de voto a todos los ciudadanos mayores de edad, teniendo su origen este sistema en el sufragio restringido, mismo que atribuía el derecho de voto a las personas que acreditaran un determinado nivel de renta.
Con respecto a la naturaleza jurídica del sufragio, la doctrina determina cuatro teorías esenciales para calificarlo, las cuales son en primer lugar el sufragio como derecho, misma que deriva de las teorías de Rousseau sobre el concepto de la soberanía popular, entendida ésta como la suma de todas las fracciones de soberanía que corresponde a cada individuo, por lo que se concluye que al ser el sufragio una manifestación de esa soberanía, es un derecho pre-estatal e innato a la condición de persona.
En segundo lugar se establece el sufragio como función, teoría que parte de la concepción que la soberanía pertenece a la Nación como un todo, y no a cada individuo.En tercer lugar se encuentra la teoría del sufragio como deber, misma que supone que el sufragio no es un derecho disponible por el individuo, sujeto a su voluntad ejercerlo o no, sino que es un verdadero deber jurídico que se justifica en la necesidad de mantener el funcionamiento armónico de la estructura política estatal.
Y por último, está la teoría del sufragio como derecho-función, misma que resulta de una especie de híbrido que además de ver al sufragio como un derecho del ciudadano, también lo conceptualiza como el ejercicio de una función pública obligatoria, ésta teoría es la que actualmente impera en la legislación costarricense.
El sufragio es, además de un derecho personal, una función, pues a través del mismo se procede a determinar la orientación de la política general, ya sea mediante la designación de los órganos representativos o mediante la votación de las propuestas que sean sometidas a la consideración del cuerpo electoral.Para que el sufragio cumpla su función cívica primordial, es necesario que se ajuste a una serie de parámetros que vienen a constituir el contenido mínimo de su estructura o sus elementos característicos, los cuales son, en primer lugar el sufragio es universal, ya que supone que su ejercicio debe ser practicado por todos los ciudadanos sin distinción alguna y sin sujeciones a ningún tipo de condición, más que las impuestas previamente por la ley en lo que a limitación del ejercicio de la ciudadanía respecta.
En segundo lugar debe ser secreto, ya que se establece que el voto es un acto absolutamente personal que se emite de manera directa y secreta. Esto es así porque sólo frente a esta característica, el elector tendrá la garantía de que no será perseguido por su comportamiento electoral. En tercer lugar el sufragio es directo ya que los electores votan directamente ante juntas electorales por aquellos ciudadanos interesados en ocupar los cargos de elección popular, y no a través de terceros que eran escogidos por los primeros para ese efecto.
En cuarto puesto tenemos que el sufragio es libre, ya que debe encontrarse desprovisto de cualquier forma de intimidación o coacción que tenga por objetivo influir en la decisión del elector, ya que las elecciones no pueden ser libres si quienes gobiernan pueden manejarlas para afianzarse en el poder, porque las elecciones libres tienen como finalidad esencial la legitimación y la limitación del poder. Por lo que todas estas características deben agruparse y presentarse en la figura del sufragio, si la misma quiere representarse como una figura democrática que con el pasar de los años ha evolucionado y debe de respetarse y consagrarse con más fuerza cada día.